La dificultad de acercarnos físicamente a nuestros seres queridos es el impedimento más sentido, qué duda cabe, pero la forma de trabajar no se queda atrás. Estamos viendo a tiempo real es el esfuerzo de las compañías por sustituir las pausas del café y las charlas del pasillo con los colegas por apps que nos transmitan esa misma sensación.